Lo primero que el importador debe hacer es seleccionar que productos va a traer y hacer un estudio comparativo de los distintos proveedores que lo fabrican. En este análisis aparte de la calidad y prestigio comercial debe ver en forma detallada los distintos costos asociados a cada alternativa y en este aspecto debe ser muy cuidadoso y considerar como mínimo lo siguiente:
-Costo Unitario de la Mercancía.
-Cláusula de Venta (CIF, FOB, Ex Fca, etc.)
-Valores de Flete y Seguros
-Aplicación de Tratados de Libre Comercio
-Forma de Pago (Cobranza Bancaria, Carta de Crédito, Pago Contado)
-Margen Operacional de la venta del producto en Chile.
Una vez seleccionado el proveedor y acordado los términos comerciales con una cotización o factura pro-forma, se procede a efectuar la preparación del embarque. En este aspecto cobra especial relevancia la Cláusula de Venta, ya que de ello dependerá quién es el encargado de contratar los servicios del Freight Forwarder (Agente Naviero) y la compañía de Seguros. Si por ejemplo se utilizo CIF, es el proveedor el que se debe preocupar se hacer las gestiones y los pagos a los Freight Forwarder y corredores de seguros. Por otra parte si es FOB o Ex Fca, es el propio importador el que debe hacer esas gestiones y sus respectivos pagos.
El siguiente paso es contactar un Agente de Aduana y dejar en sus manos el tema de la internación legal de las mercancías, la aplicación correcta de cualquier franquicia arancelaria, posibles aforos o vistos buenos y la entrega de la mercancía desde los almacenes aduaneros o extraportuarios al transporte nacional contratado por el cliente. En este proceso se debe contemplar el pago de impuestos, almacenaje, honorarios de agente de aduana y otros costos que pudiera generar la internación.